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Por una verdadera estatización de los recursos energéticos

Nuevo pronunciamiento de Plataforma 2012 sobre la crisis de YPF y la política energética.

Desde Plataforma 2012 estamos convencidos de la necesidad de recuperar nuestro petróleo y nuestro gas, así como de terminar  con el  saqueo y la contaminación  producida  por  la  megaminería a cielo abierto. Estamos a favor de una verdadera estatización de YPF y de la nacionalización de nuestros bienes naturales. Estamos a favor de una concepción diferente de dichos bienes, los cuales no son commodities, tal como se plantea desde la nueva división internacional del trabajo. Creemos que es necesario pensarlos como recursos naturales estratégicos y, al mismo tiempo, como bienes comunes. Por ello, no tenemos dudas de que empresas como Repsol o cualquier otra empresa privada o trasnacional, nada tienen que ver con los bienes naturales de todos los argentinos.

El anuncio de la expropiación del 51% de las acciones de YPF S.A. al grupo Repsol por parte del Estado Nacional despertó grandes ilusiones y una fuerte adhesión en amplios sectores de la sociedad. Esto está ligado a la significación y el valor –tanto real como simbólico- que YPF, como empresa productiva nacional, ha tenido y tiene para los legítimos anhelos emancipatorios del pueblo argentino. El anuncio  se  realiza  cuando nuestro país se  encuentra sumergido  en una  profunda crisis energética, producto  de años de despojo de nuestros bienes  naturales, nuestro petróleo, y  nuestro  gas.

Sin embargo, la ley recientemente sancionada por el Congreso Nacional no garantiza  la satisfacción de las legítimas aspiraciones que ha suscitado en la sociedad, la transformación de YPF en una empresa al servicio de los intereses del país y mucho menos la resolución de la crisis energética.

Plataforma 2012 considera que la problemática energética remite  a razones profundamente estructurales, que exigen una reflexión y un debate colectivo  sobre temas de índole estratégico, de mediano y largo plazo, en el plano político, social, económico y ambiental.

En el documento POR UNA VERDADERA ESTATIZACIÓN DE LOS RECURSOS ENERGÉTICOS,  Plataforma 2012 aborda el tema desde un contexto que abarca el proceso enajenador de nuestro patrimonio energético en su conjunto y analiza  las  consecuencias  de la privatización y  vaciamiento  de YPF, desde el gobierno  de Carlos Menem  hasta  la  actualidad. Este proceso incluye no sólo a Néstor y Cristina Kirchner como actores importantes, sino también a muchos gobernadores y legisladores que ayer apoyaron y votaron la privatización y que hoy aparecen como fervorosos defensores de la expropiación de una parte de las acciones de YPF.

La actual conformación de la matriz energética de nuestro país impone severas restricciones para sostener el proceso de crecimiento económico, para ampliar el bienestar de la población y para proteger  y reproducir el ambiente en condiciones favorables. Una estrategia de desarrollo energético, inmersa en una mirada más global y de largo plazo, no puede desconocer la integración de estos tres elementos. La matriz energética de una Nación es un bien común y constituye la base de un desarrollo verdaderamente sustentable como insumo productivo, como bien de consumo, como recurso natural estratégico y como símbolo de soberanía económica y política.

Lo realizado  hasta hoy por  el  gobierno  está en las  antípodas  de  esta necesidad. Por el manejo de los operadores del sector mediante una política de subsidios; por las concesiones arbitrarias; por las licitaciones poco claras para favorecer a empresarios amigos y afines; por el desaliento a la actividad hidrocarburífera local y la discrecionalidad en la toma de decisiones, la gestión de los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner estuvo signada en este campo por la improvisación y la visión de corto plazo.

¿Constituye  la expropiación del 51% del paquete accionario de Repsol  una  primera medida “reparatoria” , a partir de la cual resulta posible revertir 20 años de privatización y vaciamiento, encaminándonos  hacia  una  política de autoabastecimiento, de soberanía  energética  y  de desarrollo verdaeramente  sustentable, tal como lo  presenta, con un  discurso  épico, el  gobierno  de Cristina  Kirchner?¿Qué cambia respecto de la política energética vigente hasta ahora la expropiación del 51% de  las acciones de YPF?

Creemos  que existen  sólidos  argumentos que colocan un manto  de  dudas en  este sentido, teniendo en cuenta  las acciones llevadas hasta aquí por el actual gobierno, los contenidos de la propia ley de expropiación de las acciones de Repsol en YPF así como la complejidad de los problemas energéticos en el país. Ciertas razones saltan a la vista: no hay cambio alguno del marco regulatorio ni política de nacionalización de los hidrocarburos; la medida está muy lejos de ser una verdadera estatización de la empresa; no conlleva una propuesta de largo plazo que apunte a la diversificación de la matriz energética; no modifica la estrategia del extractivismo depredatorio (más bien, todo lo contrario, significa su confirmación al proponer extraer gas no convencional con metodologías hoy cuestionadas –y prohibidas- en diferentes países, debidos a sus altos costos ambientales y sociales); no tiene en cuenta ni explica la  responsabilidad de los funcionarios del gobierno en  el progresivo vaciamiento de la empresa; tampoco explica por qué no se reaccionó cuando, a partir del año 2008, se pierde el autoabastecimiento y se hace necesario importar faltantes que crecieron a tasas exorbitantes con montos insostenibles.

Asimismo, Plataforma 2012 considera que la figura de la sociedad anónima que actualmente propone la ley es, en sí misma, un símbolo de la privatización. No ha sido positiva en el pasado y abre serios interrogantes sobre el futuro de la empresa y el control estatal en materia de hidrocarburos. Es importante preguntarse si el modelo de Sociedad Anónima con participación privada puede ser útil en vistas del objetivo declarado de lograr el autoabastecimiento en recursos hidrocarburíferos; más aún cuando bajo esta forma societaria se realizaron todas las maniobras que hoy se denuncian como “vaciamiento”. En síntesis, no hay argumentos sólidos para explicarle a la ciudadanía por qué la supuesta “nacionalización” de YPF no se hace bajo la forma de una empresa del Estado.

No es una cuestión menor considerar el modo que  impuso el  gobierno  nacional para  el tratamiento del  proyecto  en el  Congreso. ¿Por qué, si la ley  de  expropiación  de  YPF es considerada de carácter estratégico, no aceptó modificar  siquiera  una  coma  del proyecto original enviado por el poder ejecutivo? ¿Qué sentido  cobra  el debate parlamentario o la  discusión pública  si  éstos se  asientan  sobre  la  sordera persistente de un gobierno que  no  atina   a  reconocer  responsabilidades pasadas ni a escuchar las  voces, reclamos y propuestas de  aquellos sectores que  históricamente han sostenido  la  defensa y  recuperación  de  nuestros bienes comunes?

No desconocemos las cuestiones ni los problemas urgentes de la coyuntura, pero ni unos ni otros pueden convertirse en el vector privilegiado de las políticas públicas argentinas, tal como ha venido sucediendo hasta ahora. Por  el contrario, las  resoluciones coyunturales  requieren  estar  inscriptas  en un proyecto  a  largo plazo.

La matriz energética de nuestro país merece recobrar la mirada estratégica a largo plazo que alguna vez le confirió Mosconi. Plataforma 2012 considera que un verdadero replanteo estructural de la matriz energética debe considerar, entre otros puntos esenciales, el incremento de la apropiación pública de la renta petrolera en la perspectiva de su estatización total, la diversificación de la matriz energética con el fin de quebrar la dependencia de los hidrocarburos y la promoción de energías alternativas no contaminantes. El Estado argentino debe recuperar su capacidad para llevar adelante una política energética al servicio de los intereses del país y consistente con un modo de desarrollo económico verdaderamente sustentable.

Mirta Antonelli, Jonatan Baldiviezo, Héctor Bidonde, Jorge Brega, Gastón Burucúa, Diana Dowek, Lucila Edelman, Mónica Galán, Mario Galvano, Roberto Gargarella, Adriana Genta, Diana Kordon, Gabriel Levinas, Darío Lagos, Javier Lindenboim, Rubén Lo Vuolo, Gabriela Massuh, José Miguel Onaindia, Mónica Scandizzo, Maristella Svampa, Enrique Viale, Nicolás Tauber Sanz, Osvaldo Tchercaski, Jaco Tieffemberg, Patricia Zangaro,

 

Para leer el documento completo:

www.plataforma.2012.org

http://www.plataforma-2012.blogspot.com.ar

Puntos esenciales del documento:

I. La privatización y vaciamiento de YPF  

Sus consecuencias

Consumación del saqueo

II. Problemas relevantes de la actual matriz energética

El caso Enarsa

La pérdida del abastecimiento

III. Análisis de la ley de expropiación

¿Qué significa la expropiación del 51%?

¿Qué significa la cesión de acciones a las provincias?

La consolidación del extractivismo depredatorio

El art. 12 y la denuncia de pasivos ambientales

Potestades del Poder Ejecutivo

Carencia de control público

La falta de modificación del marco regulatorio vigente

IV. Lineamientos para una estrategia de desarrollo energético para la Argentina